Ya hablamos anteriormente de los momentos previos y el propio procedimiento quirúrgico que conlleva la exodoncia, la cual puede deberse a causas muy distintas. Pero una vez pasado el proceso es importante también tener en cuenta ciertos aspectos y cuidados para nuestra salud bucodental.

La principal prioridad es reducir el sangrado, sin tocar la herida con la lengua para no propiciar mas irritación a la encía. Colocar una gasa en la zona intervenida es una solución habitual. Si tomamos los analgésicos antes de que pasen los efectos de la anestesia el dolor será mucho menor. La inflamación en la zona es algo normal.

A la hora de limpiar la boca debemos evitar enjuagues ni lavarla antes de que pasen 12 horas desde la intervención. Después lo haremos suavemente y sin entrar en contacto con la encía intervenida.

Descansar bien y evitar actividades intensas es otro punto importante, todo ello unido a una dieta mas bien suave, bebiendo mucho líquido. En caso de sentir molestias, fiebre o la inflamación aumenta pasados tres días, debemos acudir a nuestro dentista de forma inmediata.