Quizás a la hora de viajar en avión hemos sentido de forma repentina un dolor muy intenso en nuestra boca o incluso presión en los dientes después de esquiar o bucear en el mar.

Este trastorno es muy frecuente a cualquier edad, y es conocido como barodontalgia, un fenómeno fisiológico que surge en nuestra boca ante los cambios de presión atmosférica.

Para comprender el motivo de esta afección, es necesario saber que la corona del diente está rodeada por un tejido con cantidad de terminaciones nerviosas y paredes muy duras, conocidas como cámara pulpar. En el momento que nos enfrentamos a un aumento o disminución brusco de la presión atmosférica, la pulpa no es capaz de adaptarse a ella, por lo que presiona desde el interior hacia el exterior y hace que la pieza moleste.

El dolor puede ser tal que produzca mareos, o incluso, perdida del conocimiento. Está demostrada su mayor frecuencia en pacientes con caries sin curar, empastes y encías inflamadas.

Por este motivo es importante que nuestro odontólogo tenga en cuenta si realizamos deportes que impliquen grandes ascensos y descensos o viajamos mucho en avión.