Aunque existe la operación para blanquear dientes, existen situaciones del día a día que podemos hacer para así evitar que estos se escurezcan. A continuación, explicaremos las más importantes:
- Aplicar una capa de bicarbonato de sodio al cepillo y cepillar durante 15 minutos. A continuación lavar los dientes con un poco de pasta de dientes. De esta forma y realizando este paso una vez a la semana, conseguiremos unos dientes blancos y relucientes.
- Enjaguar la boca después de cada comida con infusiones de hojas de salvia o yerbabuena. También se puede masticar directamente las hojas de estas plantas después de comer, luego o lavarse los dientes.
- Frotar durante 45 segundos los dientes con el interior de una cáscara de Esa parte blanca que se deshecha contiene una sustancia que deja tus dientes más blancos y protege el esmalte.
- Comer manzana después de comer ayuda a limpiar los dientes y a blanquearlos.